sábado, 23 de abril de 2016

Leyendo: Lolo, un conejo diferente

Últimamente tengo un poquito abandonado el blog y no he ido siguiendo el calendario de publicaciones constante que me había fijado.
La verdad es que me he venido un poco abajo y estoy pasando por ese temido momento de los inicios en los que falla la perseverancia. Cuando no ves llegar las visitas, cuando todo el esfuerzo y la ilusión en publicar no reciben contrapartida.....Aunque sinceramente me da pena/rabia que sea así, porque poner en marcha este blog y conseguir mantenerlo era algo que me ilusionaba desde hace tiempo. Sé que todos los inicios son difíciles y que esto que me esta pasando seguramente no será a la primera ni a la última que le pase.
Así que hoy decido seguir, porque un deseo no cambia nada pero una decisión cambia todo, y mi deseo es crear, ver crecer y mantener a mi Pequetropa. 

Como hoy, dia que decido seguir, ha sido el Día del Libro, que mejor que seguir con un post sobre uno de nuestros cuentos preferidos.
Esta vez lo descubrimos a través del cole, uno de esos cuentos de la biblio que se traen los niños el fin de semana para leerlo. La verdad es que este año han elegido las profesoras unas colecciones geniales, muy cercanas con las vivencias y posibles emociones de los niños de la etapa de infantil. Este es uno de ellos. Se trata de LOLO, UN CONEJO DIFERENTE, de la Editorial SM y escrito por Guido van Genechten. 



Es un libro que trata la diversidad desde un punto de vista muy lúdico, sin tristezas, transformando la existencia de diferencias en la oportunidad de un juego divertido. Mostrando que ser diferente no es malo, y que todos somos diferentes.
"Existen conejos gordos y conejos delgados, conejos altos y bajos, conejos listos y conejos tontos, conejos sucios y conejos limpios, conejos hembra y conejos macho. Y todos tienen las orejas largas. Lolo también tenía las orejas largas, pero....."
Cuenta la historia del conejo Lolo y cómo empezó a darse cuenta de que era diferente al resto de sus amigos conejos porque tenía una oreja levantada y la otra caída.....Sus amigos conscientes también de esa diferencia le hacían objeto de burla y para ellos resultaba muy gracioso verle con la oreja caída. Lolo trató por todos los medios ponerla recta sin éxito, hasta que un día que decidió ir al médico éste le dijo que todo estaba bien, que todo el mundo tenía orejas diferentes y que las suyas eran tan buenas como las demás. Desde ese momento Lolo cambió su percepción y lo hicieron también sus amigos, ya que inventaron un juego en el que todos pudieron reirse juntos siendo diferentes.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...